Sobredosis de hongos alucinógenos

¿Se puede sufrir una sobredosis de hongos alucinógenos?

Los hongos psicodélicos, portadores de psilocibina, han sido objeto de fascinación y controversia a lo largo de la historia. Aunque la idea de una sobredosis de hongos alucinógenos evoca imágenes de peligro extremo, la realidad es mucho más compleja y matizada. Este artículo busca desentrañar la verdad, ofreciendo una visión objetiva de los riesgos, efectos y otras consideraciones importantes para entender a fondo esta experiencia, incluyendo cuándo una sobredosis de hongos alucinógenos pasa de ser un mito a una posibilidad real.

Sobredosis de hongos alucinógenos y neuroquímica de la psilocibina

Cuando se ingieren hongos psilocibios, la psilocibina, el compuesto psicoactivo principal, inicia un viaje transformador dentro del cuerpo. A medida que se metaboliza, se convierte en psilocina, la molécula que realmente interactúa con el cerebro. Esta interacción desencadena una cascada de eventos neuroquímicos que alteran la comunicación entre las neuronas.
La psilocina modula la actividad de la red neuronal por defecto (RND), una red de regiones cerebrales que se activan cuando estamos en reposo y participamos en el pensamiento autorreferencial, como la introspección y la planificación. La disrupción de la RND conduce a la disolución del ego, la sensación de unidad con el universo y la pérdida de la noción del tiempo y el espacio.

Además, la psilocibina desencadena una liberación masiva de glutamato, el principal neurotransmisor excitador del cerebro, generando efectos profundos en la percepción y plasticidad neuronal. Esta explosión glutamatérgica hiperactiva redes cerebrales normalmente silentes, provocando experiencias de sinestesia y pensamiento fluido donde los límites entre sensaciones se difuminan. Se cree que la combinación de la modulación de la RND y el aumento de la actividad glutamatérgica es responsable de los efectos psicodélicos característicos de los hongos psilocibios:

  • Alteración de la percepción sensorial. El mundo que nos rodea se transforma. Los colores se vuelven más vibrantes, los patrones se mueven y cambian, y los sonidos se distorsionan. Algunas personas experimentan sinestesia, una mezcla de sentidos en la que, por ejemplo, «ven» sonidos o «sienten» colores.
  • Distorsión del tiempo y el espacio. El tiempo puede parecer que se acelera, se ralentiza o se detiene por completo. El espacio puede distorsionarse, con objetos que parecen acercarse o alejarse.
  • Experiencias emocionales intensas. Los hongos psilocibios pueden amplificar las emociones, tanto positivas como negativas. La euforia y la alegría pueden ser abrumadoras, pero también pueden surgir ansiedad, miedo y tristeza.
  • Experiencias místicas y trascendentales. Muchas personas informan haber tenido experiencias místicas profundas bajo la influencia de los hongos psilocibios. Estas experiencias pueden incluir sentimientos de unidad con el universo, pérdida del ego y encuentros con entidades espirituales.

Aunque una sobredosis de hongos alucinógenos es rara, entender su metabolismo es clave: como hemos visto, la psilocibina se convierte en psilocina, molécula que interactúa con los receptores de serotonina. Esta interacción altera la comunicación neuronal, pero a diferencia de otras drogas, incluso en dosis altas no deprime funciones vitales como la respiración, lo que hace que una sobredosis de hongos alucinógenos sea menos peligrosa fisiológicamente.

Sobredosis de hongos alucinógenos

Dosis y variabilidad individual

La intensidad de la experiencia psicodélica depende de la dosis de psilocibina consumida, pero también de una serie de factores individuales que hacen que cada experiencia sea única.

  • Metabolismo. La velocidad con que el cuerpo procesa la psilocibina varía de una persona a otra. Algunas personas metabolizan la psilocibina más rápido que otras, lo que puede afectar la duración y la intensidad de la experiencia.
  • Sensibilidad a la psilocibina. Algunas personas son naturalmente más sensibles a los efectos de la psilocibina que otras. Esto puede deberse a diferencias en la densidad de los receptores de serotonina en el cerebro.
  • Peso corporal. El peso corporal influye en la concentración de psilocibina en el torrente sanguíneo. Las personas con mayor peso corporal pueden necesitar una dosis más alta para experimentar los mismos efectos que las personas con menor peso corporal.
  • Tolerancia. El uso frecuente de hongos psilocibios puede desarrollar tolerancia, lo que significa que se necesita una dosis más alta para lograr los mismos efectos.
  • Potencia de los hongos consumidos. La concentración de psilocibina varía entre las diferentes especies de hongos psilocibios y también entre los diferentes ejemplares de la misma especie. Las trufas tienen mucha más agua y una concentración bastante menor de psilocibina. Por ejemplo la psilocibe Mexicana tiene una concentración de 2-6 mg/gr y la Hollandia entre 3 y 8 mg/gr.

La intensidad de la experiencia depende de factores como metabolismo, peso corporal y tolerancia. Sin embargo, es crucial diferenciar entre una dosis elevada y una sobredosis de hongos alucinógenos. Esta última, aunque poco común, puede ocurrir por consumo irresponsable (ej. mezclar sustancias o confundir especies). La tabla siguiente orienta sobre dosis seguras para evitar riesgos:

Tipo Microdosis Dosis Baja Dosis Moderada Dosis Alta
Hongos secos 0,1 – 0,5 g 0,5 – 1 g 1 – 3 g 3 – 5 g
Hongos frescos 1 – 5 g 5 – 10 g 10 – 30 g 30 – 50 g
Trufas secas 0,2 – 0,7 g 0,7 – 2 g 2 – 7 g 7 – 10 g
Trufas frescas 2 – 7 g 7 – 10 g 10 – 20 g 20 – 30 g

Qué es una sobredosis y por qué los hongos alucinógenos son diferentes

El concepto de sobredosis suele evocar imágenes dramáticas de emergencias médicas, pero su naturaleza varía radicalmente según el tipo de sustancia. Cuando hablamos de estupefacientes como opioides o estimulantes, una sobredosis ocurre cuando el organismo se ve superado por efectos fisiológicos directos: la heroína puede apagar el centro respiratorio, la cocaína desencadenar un infarto, o el alcohol provocar un coma etílico. Estos escenarios implican un fallo sistémico donde la cantidad de droga en el cuerpo supera su capacidad de metabolización, llevando a consecuencias potencialmente mortales.

En contraste, los hongos y trufas psilocíbicos presentan un perfil radicalmente distinto. La psilocibina, su compuesto activo, actúa principalmente sobre los receptores de serotonina en el cerebro, sin deprimir funciones vitales como la respiración o el ritmo cardíaco. De hecho, la dosis requerida para alcanzar una toxicidad letal en humanos sería tan extremadamente alta (equivalente a consumir varios kilos de hongos secos) que resulta prácticamente inalcanzable en condiciones normales. El cuerpo previene una sobredosis de hongos alucinógenos con mecanismos naturales como náuseas y vómitos que aparecen mucho antes de que se alcancen niveles peligrosos. Además, la abrumadora intensidad psicológica de dosis elevadas actúa como barrera disuasoria.

Diferencia entre intoxicación y sobredosis

La sobredosis de hongos alucinógenos implica un riesgo vital directo, mientras que la intoxicación se refiere a reacciones adversas que, aunque graves, no comprometen necesariamente la supervivencia. En el caso de los hongos alucinógenos, una «intoxicación» podría manifestarse como un episodio de ansiedad extrema, despersonalización o incluso psicosis temporal, pero no como un fallo orgánico. El verdadero peligro no está en la sustancia en sí, sino en contextos de consumo irresponsable: confundir especies tóxicas con psilocibes, mezclar con otras drogas, o sufrir accidentes durante la experiencia psicodélica.

Históricamente, no se registran muertes atribuibles exclusivamente a la psilocibina pura. Este dato contrasta fuertemente con la peligrosidad de otras sustancias, donde dosis apenas un poco superiores a las recreativas pueden ser fatales. La relativa seguridad de los hongos no los exime de riesgos, pero los sitúa en una categoría farmacológica única: herramientas poderosas para la mente cuyo mayor peligro no es la toxicidad corporal, sino el impacto psicológico mal gestionado. 

Diferencia entre intoxicación y mal viaje

Aunque ambos términos se usan coloquialmente para describir experiencias negativas con hongos alucinógenos, existen diferencias clave en su naturaleza y gravedad:

  • Una intoxicación por hongos, es una reacción fisiológica adversa causada por sustancias tóxicas presentes en ciertas especies de hongos (no necesariamente psicoactivos). Puede ocurrir por un consumo accidental de hongos venenosos (ej. Amanita phalloides o Galerina marginata), por interacciones con medicamentos (como antidepresivos ISRS, que pueden causar síndrome serotoninérgico) o por alergias o intolerancias individuales. Los síntomas más habituales son náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal o sudoraición excesiva. El riesgo es alto y se requiere atención médica urgente.
  • Un mal viaje o «bad trip», es una crisis psicológica temporal durante una experiencia con hongos psilocíbicos. No implica toxicidad física, sino una reacción emocional excesiva y difícil de gestionar. Los síntomas suelen ser ansiedad y paranoia. No hay riesgo vital, aunque puede resultar traumático psicológicamente.

Síntomas de una intoxicación

  • Gastrointestinales graves. Náuseas y vómitos violentos, dolores abdominales intensos, diarrea severa.
  • Neurológicos. Mareos extremos, vértigo, confusión profunda, desorientación, dolores de cabeza punzantes, convulsiones, y alteraciones visuales que difieren de las alucinaciones por psilocibina.
  • Cardiovasculares. Cambios drásticos en el ritmo cardíaco (aumento o disminución), fluctuaciones en la presión arterial, excesiva producción de sudor.
  • Otros. Debilidad extrema, dificultad respiratoria, y en casos críticos, fallo hepático o renal.

La severidad de la intoxicación depende de la especie de hongo venenoso consumido y la cantidad ingerida.

Síntomas Mal Viaje 🌀 Intoxicación ☠️ Sobredosis ⚠️
Origen Crisis psicológica por psilocibina Consumo accidental de especies venenosas Dosis masivas de psilocibina (raro)
Síntomas Físicos Náuseas leves, sudoración Vómitos violentos, dolor abdominal Convulsiones (raras)
Síntomas Psicológicos Ansiedad extrema, paranoia Confusión aguda, delirio Psicosis prolongada
Duración 4-8 horas Horas a días Variable
Riesgo Vital No mortal ALTO Muy ALTO
¿Qué Hacer? Ambiente calmado, respiración LLAMAR A EMERGENCIAS URGENCIA MÉDICA
Nota: La sobredosis con psilocibina pura es extremadamente rara. El mayor riesgo proviene de confundir especies o mezclar sustancias.

Hongos venenosos y sus toxinas

Existen diversas especies de hongos venenosos, cada una con toxinas que afectan el cuerpo de manera diferente. Algunos ejemplos notorios:

  • Amanita phalloides («el hongo de la muerte»). Contiene amatoxinas, que causan daño hepático y renal irreversible. Los síntomas pueden tardar en aparecer, lo que dificulta el tratamiento temprano y aumenta el riesgo de muerte.
  • Hongos que contienen muscarina. Provocan sudoración excesiva, salivación, lagrimeo, visión borrosa, y en casos graves, dificultad respiratoria y paro cardíaco.
  • Hongos que afectan el sistema nervioso central. Pueden causar confusión extrema, delirio, convulsiones, coma, y daño neurológico permanente.

En estos casos hablaríamos de toxicidad fisiológica, pero no de sobredosis de hongos alucinógenos.

Qué hacer en caso de sospecha de intoxicación

  • Busca ayuda médica de emergencia de inmediato. No esperes a que los síntomas empeoren. La intoxicación por hongos venenosos requiere atención médica urgente.
  • Intenta identificar el hongo consumido. Si es posible, conserva una muestra del hongo para que los profesionales de la salud puedan identificar la especie y determinar el tratamiento adecuado.
  • Proporciona información detallada. Informa a los médicos sobre la cantidad de hongos consumidos, el tiempo transcurrido desde el consumo, y cualquier otro síntoma experimentado.
  • Prevención. La clave para la seguridad
  • No consumas hongos silvestres a menos que seas un experto en identificación de hongos. La identificación errónea es la causa más común de intoxicación por hongos.
  • Compra hongos psilocibios únicamente de fuentes confiables. Esto reduce el riesgo de consumir hongos contaminados o identificados erróneamente.
  • Infórmate sobre las especies de hongos venenosos que crecen en tu área. Conocer los riesgos te ayudará a evitar el consumo accidental.

En resumen, una sobredosis de hongos alucinógenos mortal es casi imposible, ya que se necesitaría ingerir una cantidad absurdamente alta, algo poco realista. Sin embargo, los verdaderos riesgos están en dos factores clave: la posible intoxicación por confundir especies tóxicas con hongos alucinógenos y la aparición de un «mal viaje» debido a una dosis demasiado alta o a una mala gestión emocional durante la experiencia. Por eso, es clave informarse bien, consumir con precaución y respetar el poder de estas sustancias.

Si quieres conocer más sobre sus efectos, cómo usarlas de forma segura y todos sus secretos, ¡sigue atento a las próximas publicaciones! El mundo de las setas mágicas es fascinante, y hay mucho más por descubrir.

FAQ’s sobre sobredosis por hongos alucinógenos

¿Es posible morir por sobredosis de hongos con psilocibina?

La psilocibina pura tiene una toxicidad extremadamente baja. La dosis letal (LD50) en animales es de unos 280 mg/kg, lo que equivaldría a consumir más de 2 kg de hongos secos para un adulto promedio (algo físicamente imposible). No hay casos registrados de muertes por sobredosis de psilocibina pura en humanos.

¿Las trufas mágicas pueden causar sobredosis?

No. Las trufas (como Psilocybe tampanensis) contienen menos psilocibina que los hongos secos. Para alcanzar dosis peligrosas, necesitarías comer cientos de gramos (más de lo que el estómago puede soportar).

¿Por qué se dice que los hongos son «seguros» si pueden dar malos viajes?

Los hongos psilocíbicos son «seguros» porque no son tóxicos para el cuerpo: no afectan la respiración ni el corazón, y es casi imposible una sobredosis mortal. Los malos viajes son crisis psicológicas temporales (ansiedad, paranoia), no daños físicos. El riesgo real está en el contexto (entorno inadecuado o mezcla con otras drogas), no en la sustancia en sí.

¿Qué pasa si como 10 gramos de hongos secos?

Consumir 10 g de hongos psilocíbicos secos (5-10 veces una dosis normal) desencadena una experiencia extrema: pérdida total de la noción de realidad, disolución del ego, alucinaciones inmersivas y posible crisis psicológica (ansiedad/paranoia). Aunque no es mortal físicamente, el riesgo de trauma emocional o accidentes por desorientación es alto. Solo recomendado en contextos terapéuticos supervisados. Dosis segura para principiantes: 1-2.5 g.

¿Y si mezclo hongos con otras drogas?

Al mezclar sí que hay riesgos reales:
  • Con alcohol o benzos: aumenta la desorientación y riesgo de accidentes.
  • Con antidepresivos (ISRS): riesgo de síndrome serotoninérgico (fiebre, convulsiones).
  • Con estimulantes: taquicardia y ansiedad extrema.

¿Los hongos alucinógenos pueden provocar adicción?

Los hongos alucinógenos (con psilocibina) no generan adicción física y tienen un bajo riesgo de dependencia psicológica. A diferencia de sustancias como el alcohol o los opioides, no provocan síndrome de abstinencia ni craving intenso.

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